Noelia Pace: hablar con los muertos.
La enigmática espiritista estrella que convoca multitudes.
Noelia Pace realiza giras por el país con espectáculos de espiritismo, muy aclamada en las redes sociales y el público la adora.
Pace se presenta como médium y en el último tiempo, tras sus apariciones en la televisión, pasó a ser además un fenómeno muy popular en los últimos tiempos.
“Todos podemos sentir a las almas, pero en medio de la locura lo perdemos de vista”, asegura Pace.
Noelia es vidente, tarotista y astróloga, se hizo famosa luego de hablar de lo casi todos tememos, por religión, por desconocimiento o simplemente por tabú.
Después de la muerte, llega la “transformación”, donde existe la posibilidad de contactarse con los seres queridos fallecidos.
Madre de dos hijos adolescentes y un matrimonio de hace 16 años, Noelia ha logrado que la gente pueda tener esperanzas y pueda al mismo tiempo asegurarse que sus seres queridos están bien, en otro plano, pero tranquilos.
Comienzos.
A los seis años empezó a expresar la comunicación que tenía con un hombre que la veía. Al poco tiempo se da cuenta que estaba muerto. Luego comenzaron a aparecer sensaciones que no podía identificar. “Lo veía y hablaba con él”, cuenta Pace.
El muerto que veía constantemente era un hombre mayor al que una vez reconoce su madre, al oír la descripción, se lo mostró en una vieja foto familiar que jamás había visto.
El hombre que la visitaba seguido, estaba allí, vestido de marinero como siempre, para su asombro su madre le relata que es el hermano de su abuela.
Tras este momento, Noelia se da cuenta que podía ver y hablar con los muertos. Como toda niña, la situación le causa un poco de miedo. Desde aquel momento las apariciones continuaban y al contrario de los demás chicos, no podía dormir con la luz prendida.
Pasaron los años y el don de contactarse lo fue desarrollando con los años, pero fue en 2014 que se animó a hacerlo público, luego de recurrir a un médico casi convencida de que sufría un ACV.
“El médico me atendió porque yo sentía un calor en la cabeza, una opresión, pero cuando la persona que veía a su lado y le transmití lo que me estaba diciendo, ahí nomás cerró la cortina del box donde estaba la camilla y me preguntó cómo podía ser que yo supiera esas cosas. Le dije la verdad: lo que veía. Después de eso, continué sin molestias y decidí compartir mi capacidad.
Después de vivir en distintas zonas del Gran Buenos Aires, finalmente se radica en Mar del Plata con su familia, y allí decide realiza su proyecto: “sesiones de espiritismo en la sala de un teatro”.
“No podía explicar lo que me pasaba y empecé a transitar esta búsqueda”, relata.
Tras años de entendimiento y capacitación, la médium se autodefine como espiritista: “conecto con las almas y los espíritus. Todos portamos un espíritu que al dejar el cuerpo empieza un proceso álmico”.
Al mismo tiempo, Noelia es convocada para la búsqueda de personas perdidas, donde ha brindado datos precisos del paradero de distintos individuos que son buscados por sus familiares.
Contactar con el más allá.
Noelia relata que encuentra parte de sus orígenes en el filósofo francés Allan Kardec, quien en 1857 escribe “El libro de los espíritus y funda al mismo tiempo las bases de la doctrina espiritista.
El caso de Noelia Pace recrea un fenómeno anclado en el tiempo, pero sobre todo marginado a un lugar de silencio.
“El espiritismo va más allá: es entregar tu capacidad energética. Y no es el único medio. El tarot, las constelaciones, las urnas; no hay un único elemento que permita contactar con almas. Es una pena que haya tanto prejuicio. Al espiritismo se lo suele ver como algo oscuro, misterioso, cuando en realidad debería ser todo lo contario: es algo natural, Es lo que somos: energía”, explica.
“Veo muertos todo el tiempo, se ven de distintas maneras. A veces rozagantes, como en sus mejores épocas en este plano; otras mantienen su último aspecto, ya más decrépitos. Hay situaciones donde no los veo, pero sí los escucho. Reconozco su energía y puedo oír lo que dicen. Las voces tienen un color especial Hablo mucho con ellos. Y en cualquier lado. En casa mis hijos ya están acostumbrados” explica Noelia.
Sesiones públicas multitudinarias.
Noelia Pace ha logrado romper las barreras y estructura del espiritismo de una mesa redonda todo lúgubre y oscuro.
Llevó las sesiones a un nivel más alto, llegó al teatro donde hay una energía mágica, donde el ser libera sus emociones, y es allí donde propone al público conectarse, aprender, que las almas puedan dejar sus mensajes, y que los presentes puedan vivir una experiencia única.
El propósito principal es que la gente se dé cuenta que la muerte es simplemente un cambio. A través de la interacción, el público puede escuchar lo que necesita con determinadas personas. Un requisito fundamental es tener la luz apagada, porque no hace falta ver; solo sentir.
“No hay que tener miedo, porque el alma cuando necesita darte un mensaje, se comunica a través en una canción que estás escuchando arriba del auto, entra el colibrí o la mariposa y se te posa encima y te está marcando que está ahí. Te hace encontrar papeles cuando estás limpiando la casa un domingo a la mañana. Ocurre porque el alma necesita comunicarse, y lo hace en cualquier momento. Venimos de una escuela espiritista que cerraba y generaba este clasismo, este para pocos, pero en realidad es para todos, porque todos somos parte de este universo”, asevera Noelia.
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Fuente: LA NACIÓN, AMÉRICA, Canal 4, El Siete Tv.