Salud

Antidepresivos: impacto y efecto.

Según un estudio, el medicamento demora aproximadamente dos semanas en hacer efecto.

Equipo PipolNews

31 de oct. de 2023 8 min de lectura

Imagen ilustrativa.

Por primera vez en la historia se realizó un estudio en Europa mediante tomografías, con el objetivo de determinar con exactitud el lapso o tiempo que dura en hacer efecto este tipo de medicación y su impacto en el cuerpo humano.

Más de 800 millones de personas en todo el mundo padecen algún tipo de trastorno mental. La depresión y la ansiedad son comunes y muchos requieren el uso de antidepresivos como los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS).

Tomar antidepresivos no necesariamente da a todos los resultados deseados, sin embargo, otros comienzan a registrar los efectos unas semanas después, pero aún no está claro por qué se produce este retraso.

Científicos del Hospital Universitario de Copenhague (Dinamarca), la Facultad de Medicina de Innsbruck (Austria) y la Universidad de Cambridge (Inglaterra) se propusieron encontrar una explicación.

Estudio.

Realizaron un estudio que proporcionó la primera evidencia de que la lentitud está asociada con cambios físicos en el cerebro que conducen a una mayor plasticidad. Estos cambios aparecen en las primeras semanas después de tomar el medicamento y pueden facilitar el camino para nuevos tratamientos. https://www.ecnp.eu/congress2023/ECNPcongress/programme/programme#!abstractdetails/0000552740

Según el estudio presentado en la reunión del Colegio Europeo de Neuropsicofarmacología (ECNP) en Barcelona, se cree que los hallazgos podrían ayudar a identificar uno de los mecanismos de acción de los antidepresivos, también fue publicado en la revista Molecular Psychiatry.

Los investigadores llevaron a cabo un ensayo aleatorio, doble ciego y controlado con placebo en un grupo de voluntarios sanos. Encontraron diferencias graduales en la cantidad de conexiones de células nerviosas, llamadas "sinapsis", entre las neuronas del grupo de antidepresivos y el grupo de control durante el curso del tratamiento.

La clase de inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS) incluye citalopram, escitalopram, fluoxetina, paroxetina y sertralina, medicamentos aprobados por el regulador de medicamentos de EE. UU. UU., la FDA, para tratar la depresión.

En el estudio realizado por investigadores europeos, 17 voluntarios recibieron 20 mg de escitalopram al día y 15 voluntarios recibieron un placebo.

Entre tres y cinco semanas después del inicio del experimento, sus cerebros fueron escaneados mediante tomografía por emisión de positones (PET) para mostrar la cantidad de glicoproteína 2A liberada por las vesículas sinápticas del cerebro, este valor se utiliza como indicador de la presencia de una sinapsis. Cuanto más frecuentemente se encuentra una proteína en una región determinada, más sinapsis habrá (es decir, mayor será la densidad de sinapsis).

Mediante tomografías se observaron diferencias significativas entre grupos en la evolución de la densidad de sinapsis a lo largo del tiempo. Gitte Knudsen, Investigadora del Hospital Universitario de Copenhague y uno de los miembros del equipo que llevó a cabo el estudio, dijo: “nos dimos cuenta de que las personas que tomaron ISRS tenían un aumento gradual de las sinapsis en el cerebro con el tiempo, neocórtex cerebral e hipocampo en comparación con personas que tomaron un placebo. No vimos ningún beneficio en las personas que tomaron el placebo".

La neocorteza cubre aproximadamente la mitad del volumen del cerebro, es una estructura cerebral compleja involucrada en funciones superiores, incluyendo la percepción sensorial, la emoción y la cognición. El hipocampo, situado en lo profundo del cerebro, es responsable de la memoria y el aprendizaje.

El Doctor Knudsen explicó que: “el trabajo que realizaron a cabo condujo a "dos conclusiones principales". Uno sugiere que los antidepresivos ISRS "aumentan la densidad sináptica en las áreas del cerebro más afectadas por la depresión".
"Sugieren que la densidad de las sinapsis cerebrales puede estar implicada hasta cierto punto en la acción de los antidepresivos y representa un objetivo para el desarrollo de nuevos fármacos para la depresión", agregó.

El segundo hallazgo es que los nuevos datos "muestran que las sinapsis se forman durante muchas semanas, lo que explica por qué estos medicamentos tardan en surtir efecto", dijo Marcelo Chetkovic, Expresidente de la Asociación Psiquiátrica Argentina y actual Secretario Científico de la Asociación Psiquiátrica Argentina (AAP).

“Este es un estudio muy exhaustivo realizado por un grupo de investigadores bien informados”, asevera Chetkovic.

"Se ha demostrado que el escitalopram, una clase selectiva de inhibidores de la recaptación de serotonina, induce cambios neuroplásticos después de varias semanas", expresa Lee, Director Médico de INECO, quien lo evaluó por primera vez utilizando tecnologías sofisticadas como la neuroimagen funcional: "Proliferación sináptica en la corteza prefrontal".

“Los investigadores confirmaron lo que se sospechaba de forma indirecta: la idea de que los antidepresivos revierten los cambios neuroplásticos en la depresión”, dijo.

Este estudio rompió el paradigma que suponía que había cambios químicos en la depresión y demostraba que los cambios eran estructurales, afectaban la conectividad cerebral durante la depresión y mejoraban con el tratamiento.

"Ha habido mucha investigación experimental en animales para respaldar esta idea, pero no en humanos. Esto se debe a un fenómeno conocido como latencia antidepresiva, que es el tiempo que tardan los efectos en comenzar a aparecer. En todos los casos es algo que se conoce, se gestiona y se explica al paciente”, agrega.
"No es algo complicado ni complicado en sí mismo", afirmó.

“Para algunos pacientes gravemente enfermos, los expertos toman algunas medidas adicionales más allá de la adecuada supervisión psicoterapéutica para aliviar el malestar hasta que la depresión comienza a mejorar”, explicó el experto, autor de "El estigma de la enfermedad mental".

Cómo actúan los antidepresivos ISRS?

Según la Clínica Mayo, los inhibidores de la recaptación de serotonina y norepinefrina (IRSN) alivian la depresión al afectar los transmisores químicos (neurotransmisores) que se utilizan para comunicarse entre las células cerebrales.
Como la mayoría de los antidepresivos, actúa cambiando la química del cerebro y las conexiones en los circuitos de las células nerviosas del cerebro que se sabe que regulan el estado de ánimo para ayudar a aliviar la depresión. Es posible que el medicamento no funcione para todos los pacientes.

Los científicos estiman que más del 30% de los pacientes no se benefician de este tipo de antidepresivos.

En general, los antidepresivos pueden causar efectos secundarios similares, pero es posible que algunas personas no experimenten estos efectos secundarios.
Los efectos secundarios más comunes incluyen náuseas, sequedad de boca, mareos, dolor de cabeza y sudoración excesiva.

Qué es la depresión?

La depresión se puede describir como el hecho de sentirse triste, melancólico, infeliz, abatido o derrumbado. La mayoría se siente de esta manera de vez en cuando durante períodos cortos.

La depresión clínica es un trastorno del estado anímico en el cual los sentimientos de tristeza, pérdida, ira o frustración interfieren con la vida diaria durante un período de 2 semanas o más.

Para tener en cuenta:

La depresión puede suceder en personas de todas las edades: adultos, adolescentes, adultos mayores e inclusive en niños.

Los síntomas de depresión incluyen:

Agitación, inquietud, irritabilidad e ira
Volverse retraído o aislarse
Fatiga y falta de energía
Sentimientos de desesperanza, impotencia, inutilidad, culpabilidad y odio a sí mismo
Pérdida de interés o placer en actividades que antes disfrutaba, incluyendo el sexo
Cambio repentino en el apetito, a menudo con aumento o pérdida de peso
Pensamientos de muerte o de suicidio
Problemas para concentrarse
Problemas para conciliar el sueño o exceso de sueño

Los niños pueden presentar síntomas distintos a los de los adultos, se debe prestar atención a los cambios en el rendimiento escolar, el sueño y el comportamiento.

Depresión mayor:

Sucede cuando los sentimientos de tristeza, pérdida, ira o frustración interfieren con la vida diaria por 2 semanas, o períodos más largos de tiempo.

Trastorno depresivo persistente:

Se trata de un estado de ánimo depresivo que dura 2 años. A lo largo de ese período de tiempo, puede tener momentos de depresión mayor junto con épocas en las que los síntomas son menos graves.

Otras formas comunes de depresión incluyen:

Depresión posparto: Muchas mujeres se sienten algo deprimidas después de tener un bebé, pero la verdadera depresión posparto es más grave e incluye los síntomas de la depresión mayor.

Trastorno disfórico premenstrual: (TDPM). Síntomas depresivos que ocurren 1 semana antes de la menstruación y desaparecen después de menstruar.

Trastorno afectivo estacional (TAE): ocurre con mayor frecuencia durante las estaciones de otoño e invierno, y desaparece durante la primavera y el verano, muy probablemente debido a la falta de luz solar.

Depresión mayor con características psicóticas: sucede cuando una persona padece de depresión con una falta de contacto con la realidad (psicosis).
Trastorno bipolar: (anteriormente llamado depresión maníaca): esto ocurre cuando la depresión se alterna con la manía. El trastorno bipolar tiene la depresión como uno de sus síntomas, pero es un tipo diferente de enfermedad mental.

Causas

La depresión a menudo se transmite de padres a hijos. Esto puede deberse a los genes, comportamientos aprendidos en el hogar o a su entorno. La depresión puede ser desencadenada por un hecho estresante o infeliz en la vida. Frecuentemente, se trata de una combinación de estos factores.

Muchos factores pueden causar depresión, como:

Alcoholismo o consumo de drogas
Afecciones médicas, como cáncer o dolor (crónico) a largo plazo
Situaciones o hechos estresantes en la vida, como pérdida de trabajo, divorcio o fallecimiento de un cónyuge u otro miembro de la familia
Aislamiento social (una causa común de depresión en adultos mayores)

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